http://www.larazon.es/noticia/5898-la-policia-busca-a-tres-complices-de-las-terroristas

Dos mujeres suicidas vuelan por los aires dos convoyes y matan a casi 40 personas / Una de las explosiones se produjo en la parada cercana a la sede del FSB, antigua KGB

La Policía busca a tres cómplices de la matanza de Moscú

29 Marzo 10 - Moscú - Ep

Compártelo:

Medvedev promete una «guerra sin cuartel», casi un año después de que anunciara la victoria rusa sobre los rebeldes.

El terrorismo caucásico volvió ayer a golpear a Rusia con dos salvajes atentados con bomba perpetrados por mujeres suicidas conocidas como «Viudas Negras» en el metro de Moscú, que dejaron al menos 38 muertos y unos 70 heridos. «Los atentados fueron cometidos por terroristas que tienen relación con el Cáucaso Norte», señaló Alexandr Bortnikov, jefe del Servicio Federal de Seguridad (FSB).

Las explosiones, en las que se utilizó ciclonita, una de las sustancias preferidas por el separatismo islamista checheno, ocurrieron a primera hora de la mañana, cuando miles de trabajadores se dirigían a sus oficinas. El metro de Moscú soporta un tráfico de nueve millones de pasajeros diarios. La primera detonación sucedió a las 7:56 horas hora local en la estación de metro Lubyanka, frente a la sede del FSB (antiguo KGB), el principal órgano de seguridad responsable de la lucha antiterrorista. La cámara de seguridad del tren «Krasnaya Strela» (Estrella Roja) grabó las imágenes de la potente explosión equivalente a unos 4 kilogramos de trilita y que causó la muerte de entre 20 y 25 viajeros. Unos 40 minutos después se produjo la segunda explosión (2 kilos de trilita) en la estación Park Kultury, a unos 300 metros de la sede de varias corresponsalías de medios de comunicación nacionales y extranjeros, incluida Efe.

Según datos preliminares, el segundo atentado acabó con la vida de entre 12 y 14 personas, además de dejar un número indeterminado de heridos. Ambas estaciones se encuentran en la línea roja, la más antigua (1935) y una de las más concurridas de todo el metropolitano. «Las explosiones ocurrieron mientras los vagones se encontraban en las estaciones con las puertas abiertas. Murieron algunos pasajeros en el vagón y otros en la plataforma», señaló una portavoz del Ministerio de Emergencia a la televisión rusa. El hecho de que las puertas de los vagones estuvieran abiertas pudo restar potencia a las explosiones y salvó muchas vidas, según explicaron ayer varios expertos.

Otra circunstancia afortunada fue el hecho de que muchos moscovitas llegaran tarde al trabajo al olvidarse de adelantar sus relojes para adaptarlos al horario estival. Las imágenes captadas por teléfonos móviles mostraron los pasillos de las estaciones cubiertos por un humo cegador, con los pasajeros aturdidos y acostados en el suelo intentando llamar con sus aparatos telefónicos. Tras las explosiones, los accesos a la línea roja del metro en esas dos estaciones fueron cerradas, lo que provocó el caos y el pánico entre los viajeros. El presidente ruso, Dimitri Medvedev, que el pasado abril anunció el fin de la guerra chechena, declaró ayer una batalla sin cuartel contra el terrorismo y calificó de «insuficientes» las medidas adoptadas hasta ahora por las Fuerzas de Seguridad para acabar con los rebeldes islamistas.

Por su parte, el primer ministro ruso, Vladimir Putin, quien ascendió en su carrera política debido a su contundencia contra los terroristas chechenos, aseguró que «los terroristas serán liquidados» y suspendió su visita a Siberia para regresar con urgencia a la capital. Los agentes de seguridad buscaban ayer a otras dos mujeres que acompañaron a las suicidas hasta la entrada del metro y que fueron filmadas por las cámaras de seguridad del suburbano. Un millar de efectivos de las tropas del Interior fueron movilizadas para patrullar el metro, mientras otras ciudades como San Petersburgo reforzaron las medidas de seguridad en previsión de posibles atentados. El último atentado contra el metro fue en 2004.